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Frente al empuje del gobierno de Donal Trump, para adelantar la revisión del TMEC, el gobierno de México debe recoger ese impulso y poner sobre la mesa, no el escrutinio de tales o cuales puntos.
Blayne Haggart, Profesora de la Universidad de Brock, escribe un análisis legal y político sobre la relación comercial entre los tres países de América del Norte.
Por la fuerza y sin consenso, aventaron campo mexicano al remolino de mercados internacionales
A partir de la firma del TLCAN, a mediados de los años noventa, México quedó enganchado a los derroteros geopolíticos angloamericanos.
Cuando Carlos Salinas de Gortari recibió la noticia de la insurgencia armada de los zapatistas, el 1 de enero de 1994, preguntó: "¿Y por qué a mí?". Ahora, es posible que el presidente Andrés Manuel López Obrador también se lo esté preguntando.
La esencia del TLCAN y del T-MEC, con su esquema maquilador, es precisamente “desacoplar” el sector exportador de la economía interna, escribe Alberto Vizcarra Ozuna.
Sobre el interés que mostró Reino Unido para incorporarse al T-MEC, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que esa decisión la tienen que tomar los tres países miembros del tratado, es decir, México, Estados Unidos y Canadá. Además, expresó que es partidario de que se mantenga el acuerdo, ya que fue un logro importante el haber convencido a quienes no querían que se ratificara.
El canciller anunció que los próximos 8 y 9 de julio se realizará la visita oficial de trabajo. Adelantó que mañana darán a conocer más detalles.
El decreto de más de mil hojas precisa acuerdos a los que llegaron los tres países socios tras más de dos años de negociación.
Los legisladores consideran que los productos fabricados en México son cruciales para el funcionamiento de las empresas estadounidenses.