Crónicas de Exploración | La ciudad es territorio y el territorio se defiende
Nuestras ciudades se fundaron por el territorio que las albergó, esto pudo ser la cercanía con un cuerpo de agua, un río o un lago, o la protección que las montañas brindaban y los suelos fértiles que permitieron imaginar una comunidad en ese sitio.

Por Pablo Montaño*
Conexiones Climáticas / Exploradores de National Geographic Hub México
El Cerro de la Mesa de los Caballos se encuentra en la ciudad de Chihuahua, Chihuahua, tiene el último bosque de encino enano en la ciudad. Dos semanas antes de que lo visitáramos había sido incendiado, asediado por la presión inmobiliaria el cerro se ha vuelto un espacio de defensa territorial. Los colectivos Salvemos los Cerros de Chihuahua (SLC) y Viernes por el Futuro habían organizado acciones para señalar la necesidad de salvar este y otros espacios naturales. Llegamos con poca expectativa de encontrar algo, pero entre los ocotillos calcinados estaba la vida que Lucho Rivera, defensor de los cerros y vocero de SLC nos había anunciado. Para estos colectivos defender los cerros no es solo una lucha por la identidad de su ciudad sino por el ecosistema que permite la vida en esta región, la fuente de agua, de aire y el espacio cohabitado con otras especies.
En Chihuahua, al desierto y a sus cerros se les piensa vacíos y propicios para ser intervenidos, urbanizados o dinamitados. Pero caminar con sus defensores es el mejor remedio para esta ceguera. Lucho nos enseña una cueva donde una colmena de abejas silvestres sobrevivieron al fuego. El cerro café resulta estar lleno de formas de vida que retan el discurso oficial que habilita la urbanización descontrolada. Chihuahua fue el lugar donde arrancamos Ciudades Territorio, un proyecto que busca entender las ciudades como ecosistemas.
El territorio sigue vivo y aunque lo ignoremos sigue sosteniendo la vida, desde Ciudades Territorio, con el financiamiento de la National Geographic Society, se subraya la gran tarea de personas, organizaciones y colectivos que defienden el territorio de nuestras ciudades. El proyecto es llevado desde la organización Conexiones Climáticas y en su año de operación se ha enfocado en tres territorios urbanos con distintas estrategias y resultados.
Cuando pensamos en la idea de defender el territorio, nuestra mente vuela a remotos parajes de bosque virgen en una sierra amenazada por minería a cielo abierto, o a la lucha de una comunidad en la selva resistiendo contra el monocultivo de palma o a algún otro conflicto de difícil acceso. Las ciudades y las zonas que las rodean no están en nuestro imaginario de territorio; difícilmente imaginamos que la defensa del territorio aplica para los cerros que rodean a la ciudad de Chihuahua o para el río Santa Catarina que divide a Monterrey de punta a punta. Nos han enseñado que las ciudades son para generar dinero y por lo tanto, su territorio debe servir a este propósito y así prevalece esta visión de “desarrollo” por encima de cualquier otra.
Pero a menos de un kilómetro de las avenidas y los fraccionamientos, nuestros recorridos nos mostraron que el venado cola blanca sigue habitando los cerros y valles de Chihuahua, lo mismo que las liebres, lagartijas y aves migratorias y residentes. El objetivo del proyecto es que esto vuelva a ser sabido para todos, para ello lanzamos la Guía para Conocer y Amar los Cerros de Chihuahua, elaborada por Diana Lugo, la cual sirva para recorrer y entender el papel de los ecosistemas que permiten la vida en el desierto.
Nuestras ciudades se fundaron por el territorio que las albergó, esto pudo ser la cercanía con un cuerpo de agua, un río o un lago, o la protección que las montañas brindaban y los suelos fértiles que permitieron imaginar una comunidad en ese sitio. Siglos después, se ha olvidado por qué fue que ahí llegamos como especie; el río fue convertido en drenaje y fue entubado, el lago lo desecaron para ganar terreno y las montañas boscosas fueron invadidas por fraccionamientos de lujo.
En el río Santa Catarina, en Monterrey, el cual el gobierno de Nuevo León pretende deforestar para construir un viaducto, con la ayuda de la exploradora Andrea Villarreal y el colectivo Viaje al Microcosmos, Armando Vega, también explorador de National Geographic y fotógrafo de este proyecto, capturó las muchas especies que viven en un río que para la narrativa oficial es poco más que un drenaje. Los colectivos de #UnRíoenelRío han documentado más de 800 especies en el río, entre ellas el castor americano, la tortuga de concha blanda y la garza de dedos dorados. Nadie se imaginaría que en la ciudad que es considerada el corazón industrial del país, sobreviven especies tan singulares.
El poder se exaspera ante la visión natural del territorio, al final de cuentas el capital demanda que todo se mercantilice y lo que no es posible que se sacrifique. Pero la defensa de estos espacios ha rendido frutos y hoy el viaducto se tambalea antes de existir y antes de la llegada del primer huracán. La ciudadanía activa ha sido suficiente para que sus narrativas de despojo pierdan efectividad. Con Viaje al Microcosmos se produjo una guía que permite a las y los visitantes del río Santa Catarina y de otros espacios naturales descubrir que habitan un territorio compartido.
Incluso en la capital del país la historia se repite, Xochimilco libra una batalla por seguir siendo el último testigo vivo de lo que fue el Valle de México con su sistema de lagos. Acá la alianza la hicimos con el Laboratorio de Regeneración Ecológica de la UNAM y nos dimos a la tarea de documentar las actividades que permiten que Xochimilco siga con vida, como el censo axolotero y la defensa de la chinampería. Ahora las fotos de Armando se combinaron con los textos de la Jazmina Barrera lanzaremos para hacer un Álbum de Xochimilco donde quedan plasmados distintas dinámicas y afectaciones de este territorio.
Ciudades Territorio es la exploración de estrategias de comunicación y de activación para la comprensión y defensa del territorio urbano. El trabajo no ha terminado, encontramos que se puede elevar y promover la defensa de espacios antes despreciados y lo esencial que resulta sumar con quienes ya están defendiendo el territorio, sin importar cuál sea la ciudad o la región, siempre es lo vivo lo que sostiene la vida, la respuesta a la crisis climática es el cuidado de nuestra casa común y luchar por nuevas formas de habitar sin destruir y pasar de normalizar la devastación a confrontar y después de a revertirla. Habitamos lugares hermosos, su belleza sigue ahí, mermada o amenazada pero sigue llamándonos a explorar y facscinarnos con lo mucho que no entendemos y de lo que aún así dependemos.
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Pablo Montaño comunicador climático y explorador de la National Geographic Society. Es cofundador y director de Conexiones Climáticas, organización dedicada a la comunicación de la crisis climática en México. Estudió ciencias políticas en el ITESO y una maestría en medio ambiente y desarrollo sustentable en la University College London. Fue productor y guionista de la serie documental El Tema y es co-conductor del podcast Humo: Señales para otros mundos posibles.

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