#AdiósALaGuerra: Colombia anuncia acuerdo final de paz con las FARC

El acuerdo suscrito incluye el reconocimiento a las víctimas y propone una resolución de los problemas agrarios que originaron el conflicto.

agosto 24, 2016 8:00 pm Published by

“La mejor forma de terminar con la guerra fue sentarnos a hablar de la paz: la guerra ha terminado”, dijo este miércoles Humberto de la Calle, representante de la delegación de paz del gobierno colombiano, tras anunciar el cierre del acuerdo final de paz suscrito con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia en el Palacio de Convenciones de La Habana, Cuba.

El pacto tiene como objetivos lograr una paz duradera y no repetir el conflicto armado, así como la resolución de los problemas agrarios que dieron origen a la guerrilla en su momento, satisfacer a quienes han sido afectados por la violencia y dar respuestas sobre las personas fallecidas, de acuerdo con un comunicado conjunto leído por Rodolfo Benítez en nombre de Cuba y Noruega, países garantes del acuerdo.

Según Dag Nylander, garante noruego, el acuerdo dará paso a una nueva inclusión social, en especial a quienes han padecido a raíz del conflicto, cuyos problemas deberán resolverse por las vías constitucionales con garantías plenas para aquellos combatientes que deseen participar en política.

Asimismo, el acuerdo compromete a ambas partes a un cese al fuego y, en el caso de las FARC, a un abandono de las armas y la futura reincorporación a la vida social, política y económica del país, instándolos a la construcción democrática de Colombia.

Con base en lo convenido, las victimas deberán ser resarcidas a través de un sistema integral de verdad y justicia para luchar contra la impunidad, combinando herramientas judiciales y mecanismos complementarios que contribuyan al esclarecimiento y la búsqueda de personas desaparecidas.

Asimismo, ambas delegaciones acordaron una nueva visión sobre el tema de las drogas ilícitas con un enfoque general de derechos humanos y salud pública.

Y con respecto a la lucha contra las organizaciones criminales que han sido responsables de homicidios y masacres en perjuicio de activistas y organizaciones sociales —consideradas como sucesoras del paramilitarismo—, el documento contempla medidas como una unidad de investigación especial y un cuerpo de élite para combatirlas, así como un programa integral de protección para las comunidades vulnerables.

 

Claves del enfrentamiento armado:

  • Inicios del conflicto

El 9 de abril de 1948 fue asesinado en Bogotá Jorge Eliécer Gaitán, un líder popular conocido como “Caudillo del Pueblo”, lo cual detonó luchas internas, especialmente en el campo, y dio inicio a una época conocida como “La violencia” en la que murieron unas 300 mil personas a lo largo de casi dos décadas y unas 2 millones de personas fueron desplazadas en un país que entonces tenía 11 millones de habitantes.

En este contexto de movilización campesina y popular y de un sistema político cerrado y poco representativo, nacieron en 1964 las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de la mano del campesino Pedro Antonio Marín, quien se hacía llamar “Manuel Marulanda” y a quien se conocía como “Tirofijo” y falleció en la selva de muerte natural en 2008.

  • Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia

Las FARC son una guerrilla marxista integrada en buena medida por campesinos que —según cifras del gobierno— tiene en sus filas a unos 7 mil hombres y mujeres que dicen luchar por el pueblo, los pobres y la equidad entre los colombianos.

Su objetivo original fue que la oligarquía conservadora compartiera el poder y priorizara la reforma agraria en un país donde más de 5 millones de personas han sido desplazadas a la fuerza en su mayoría por milicias de extrema derecha al servicio de hacendados, comerciantes y narcotraficantes, sin embargo, las FARC se volvieron impopulares cuando en las últimas décadas comenzaron a secuestrar, extorsionar y cobrar impuestos a la producción de cocaína y a la minería ilegal para financiarse.

  • Cifras del conflicto

De acuerdo con cifras oficiales, más de 6 millones de colombianos han sido víctimas del conflicto armado, la mayoría desplazados del campo por la acción de los rebeldes y de las bandas paramilitares que nacieron a fines de la década de 1970 como respuesta a la acción de la guerrilla.

Al menos 220 mil personas fueron asesinadas entre 1958 y 2012, asimismo, entre 1970 y 2010 casi 40 mil personas fueron secuestradas y 33% de esos plagios fueron cometidos por las FARC, de acuerdo con datos del Centro Nacional de Memoria Histórica. Se estima que unos  20 mil colombianos han sido víctimas de desaparición forzada.

Entre 1996 y 2012 las FARC tuvieron en jaque a diferentes gobiernos con la toma de pueblos y zonas del país, ataques sangrientos a bases militares y el secuestro de políticos, militares y ciudadanos, entre los que se encuentran el de la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y el de tres contratistas estadounidenses.

La dinámica del conflicto cambió con la creación del “Plan Colombia” auspiciado por Estados Unidos, que implicó una reorganización de las fuerzas armadas colombianas, de la inteligencia militar y de la financiación para la compra de helicópteros, radares, aviones fantasma, sofisticados sistemas de comunicación y municiones. Tras ocho años de gobierno del ex presidente Álvaro Uribe (2002-2010), el Estado colombiano logró infiltrar a la guerrilla, dar de baja a sus principales cabecillas, replegarlos a la selva y diezmar a sus tropas.

  • Esfuerzos por la paz

Desde el nacimiento de la guerrilla diversos gobiernos han intentado sin suerte sellar la paz: el presidente Belisario Betancur (1982-1986) apostó todo su capital político a alcanzar un acuerdo con las FARC y de ese proceso nació la Unión Patriótica, un movimiento político de izquierda que en los años 1980 y 1990 vio caer asesinados a por lo menos 3 mil de sus integrantes y simpatizantes a manos de narcotraficantes, paramilitares y militares corruptos.

En 1998 presidente Andrés Pastrana, quien gobernó hasta 2002, volvió a apostar por la reconciliación y negoció con las FARC durante casi todo su gobierno. El proceso terminó cuando en febrero de 2002 el grupo guerrillero secuestró un avión en pleno vuelo y se llevó consigo a un senador.

Diezmadas las FARC, en septiembre de 2012 el actual presidente Juan Manuel Santos anunció el inicio de un nuevo proceso de paz con la guerrilla y en octubre instaló una mesa de negociación en Oslo, Noruega, y luego se trasladó definitivamente a La Habana.

  • Las negociaciones 

En casi cuatro años de negociación, las delegaciones negociadoras en Cuba llegaron a acuerdos clave en temas como una reforma agraria, la erradicación en todo el territorio nacional de minas antipersonales, la salida de las filas rebeldes de menores de edad, el blindaje jurídico y político a los acuerdos, la forma en que los actores del conflicto armado pagarán por sus crímenes, el cese bilateral y definitivo del fuego y el abandono de las armas por parte de los guerrilleros.

(Con información de AP)

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