“La vida de los palestinos está condicionada por la ocupación y la guerra”: Irmgard Emmelhainz

La escritora y la editora hace una aproximación a la vida cotidiana en Palestina en su libro ‘El cielo está incompleto’.

julio 23, 2025 1:31 pm Published by

Por Héctor González

 Rodeado por el mar Mediterráneo, Egipto, Jordania e Israel, se encuentra Palestina. Con una extensión de poco más de 6 mil kilómetros cuadrados y con una población superior a los 5 millones 100 mil habitantes, está marcado por la ocupación y el conflicto con Israel. Acostumbrados a recibir noticias relacionadas con ataques, enfrentamientos y muerte, de este lado del Océano se desconoce en realidad cómo es la vida por aquellos lares. Sabemos poco o casi nada sobre la cotidianeidad y su cultura, y es precisamente en estos puntos donde la editora y escritora Irmgard Emmelhainz pone el acento en su libro El cielo está incompleto (Siglo XXI).

El título parte de los diarios de la autora escritos durante una estancia en Palestina entre 2007 y 2008. Para esta edición retrabajó los textos a fin de hacerlos más legibles y actuales. “Para la versión en inglés me hicieron poner notas a pie de página para respaldar todo lo que decía con notas de prensa, incluí parte de esto además de una introducción relacionada con el contexto actual”.

Con un pie en el diario y otro en la crónica, Irmgard nos asoma a los cafés, bares y a una vida cultural muy activa de la región. “Hay una vitalidad interesante en la que hay discusiones, debates, diálogos, todo el tiempo. En México, la mayoría de la gente no tiene idea de lo que pasaba en los territorios ocupados y me parece importante hablar de esto. Actualmente a los palestinos no los bajan de terroristas o de pedazos de carne estrellados por las bombas israelíes”.

Durante el periodo en que ella vivió allá había una situación más tranquila que la actual. Hoy, según datos del Ministerio de Sanidad palestino, desde el 7 de octubre de 2023 hasta mediados de julio de 2025, las muertes por ataques israelíes ascendían a 59,106. “Ahorita en un asedio constante en Cisjordania, la población no puede circular libremente por los territorios ocupados, meten por nada a la gente a la cárcel. Desde hace tiempo los palestinos viven en lo que llaman la tiranía de la incertidumbre porque nunca saben si les pondrán un punto de control, si vas a poder llegar a la boda de tu primo o si una fiesta acabará por una redada de la policía”.

(Cortesía Antonio Díaz/Siglo XXI).

Futuro poco alentador

Pese a la diferencia cultural, la escritora recuerda su estancia como una buena época, “es un lugar bellísimo, con miles y miles de años de historia, yo me sentía como en mi casa, incluyendo el machismo exacerbado; además, es un lugar donde hay teatro y cine de vanguardia, está al día en la producción cultural global. Hay poetas, activistas, periodistas, trabajadores increíbles, yo me la pasé bomba y me encantaría regresar”.

En paralelo a esto, están los años de historia y el peso de la guerra. “Cada palestino tiene la memoria en el cuerpo de lo que han sido los años de apartheid, del despojo. Todos saben de dónde es el pueblo, de dónde fueron desplazados forzosamente sus antepasados en 1948. La vida de todas las personas está condicionada por la ocupación y por la guerra. Todos mis amigos hombres han estado encarcelados al menos una vez”.

Si bien, reconoce en su población una generosidad, amor, calidez y solidaridad inigualable, detalla que todo esta politizado. “El dinero que usan para sus transacciones es el séquel (moneda israelí) no es una moneda independiente. Todos los aspectos de su vida están subordinados a Israel, pero a pesar de eso, no viven amargados ni enojados. Se saben divertir, son solidarios y empáticos. Algo que me impresionó mientras estuve allá es que nadie me preguntó mi religión”.

La lectura de los diarios de El cielo está incompleto, deja ver que la forma de vivir el conflicto es distinta entre una generación y otra. “Los discursos alrededor de la paz cambian muy rápido entonces observé que no todos los viven igual. La gente de mi edad, que estuvo activa en la Segunda Intifada y son hijos de la generación de Yasser Arafat, culpan a los mayores por haber hecho concesiones con el territorio. En cambio, la generación más joven está enojada con quienes tienen mi edad porque ya les tocó crecer en un territorio amurallado. La gente de mi generación gozó de cierta cooperación e intercambio cultural con Israel, incluso había relativa flexibilidad en las fronteras, algo ahora imposible. Es decir, decir la experiencia del conflicto se vive de manera fragmentada. Algo interesante y a la vez muy fuerte es que el sistema educativo explica a los niños que tienen diez años qué es la ocupación”.

De cara al futuro Irmgard Emmelhainz, no ve una solución del conflicto en el mediano o largo plazo. “Hay mucha gente saliendo de los territorios y tienen que avanzar por caminos que son vigilaos por israelíes, viven desplazamientos forzados, son el laboratorio de control de que lo llamo población redundante. Llevan resistiendo 80 años, no es posible que en el mismo territorio existan dos estados. Se podría hablar de la posibilidad de un estado cogobernado por israelís y palestinos, el problema es que eso amenaza a la excepcionalidad de Israel, que es un estado judío”.

Concluye que el nivel del conflicto actual pone en juego el concepto del humanismo y advierte que estamos al borde un abismo, producto del “nivel de odio y de sadismo, con el cual Israel está aplastando a los palestinos de Gaza y persiguiendo a los de Cisjordania. Por un lado, veo una reacción favorable de muchos países que ha dado mucha visibilidad a los palestinos y los ve como ejemplo de resistencia; pero por otro, veo que los jóvenes están muy radicalizados y rápidamente satanizan a los judíos. Me preocupa que se haga una nueva ola de antisemitismo a raíz de esto. Al mismo tiempo, también creo que el resto del mundo podría hacer más para resolver el conflicto porque lo está haciéndose cada vez más evidente es el plan expansionista de Israel. En todo caso, el futuro no es nada alentador”.

 

 

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