Lizzo enfrenta nueva demanda por acoso sexual y racismo
Asha Daniels, diseñadora de ropa denunció que se enfrentó al racismo y a la vergüenza hacia los gordos (body-shaming) mientras trabajaba para Lizzo.

Nuevamente Lizzo se enfrenta a acusaciones de acoso sexual y racismo.
Una diseñadora de ropa denunció que se enfrentó al racismo y a la vergüenza hacia los gordos (body-shaming) mientras trabajaba para la cantante afroamericana.
Se trata de Asha Daniels, quien trabajó con los bailarines de Lizzo en su gira 2023, y aseguró que recibió “comentarios racistas y gordofóbicos” por parte de Amanda Nomura, encargada de vestuario de Lizzo.
“Me sentí como si estuviera viviendo en un manicomio. Fue totalmente chocante”, dijo Daniels a ‘NBC News’.
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Exbailarinas demandan a Lizzo por acoso sexual, hostilidad y ‘body shaming’
Cabe recordar que Lizzo fue demandada por tres de sus bailarinas quienes la acusaron de acoso sexual, creación de un ambiente de trabajo hostil y “body-shaming”.
“Estaba escuchando a esta mujer negra en este enorme escenario con este mensaje de amor propio, cuidado de los demás, ser empática, fuerte y defender a los demás. Y yo era testigo de cómo yo misma, los bailarines y los vocalistas de fondo y mi equipo local en cada ciudad éramos acosados e intimidados regularmente”, dijo Daniels.
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La diseñadora aseguró que escuchó a Nomura “burlarse tanto de Lizzo como de los bailarines en múltiples ocasiones. Imitaba a las bailarinas y a Lizzo haciendo una ofensiva imitación estereotipada de una mujer negra. Nomura también se refería a las mujeres negras de la gira como ‘tontas’, ‘inútiles’ y ‘gordas'”.
Daniels -quien empezó a trabajar en la gira de Lizzo en febrero de 2023- aseveró que sufrió acoso sexual por parte de la dirección de Lizzo.
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También alegó que Nomura, la tripulación y el equipo directivo de Lizzo discutieron abiertamente la posibilidad de contratar a trabajadoras sexuales para actos lascivos mientras estaban de gira en Ámsterdam.
Señaló que la obligaron a trabajar jornadas de 20 horas diarias y que a menudo trabajaba siete días a la semana.
Lizzo, de 35 años, figura en la demanda junto a su productora Big Grrrl Big Touring, la directora de la gira Carlina Gugliotta y Nomura.
Lizzo ha negado todas las acusaciones.
Stefan Friedman, su portavoz, afirmó en un comunicado: “Prestaremos a esto toda la atención que se merece. Ninguna”.

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