Activistas rechazan traslado de elefante Annie al zoológico de Aragón

El miércoles 20 de marzo inició el traslado de la elefante africana Annie hacia el zoológico San Juan de Aragón, ubicado en la alcaldía Gustavo A. Madero, Ciudad de México. Esta decisión de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) fue criticada por activistas y ambientalistas como Arturo Islas, la organización Abriendo Jaulas Abriendo Mentes y el despacho Va X sus Derechos–  el cual promovió un amparo a favor de la elefante Ely que actualmente se encuentra en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. 

Islas fue quien, el 17 de febrero de este año, inicialmente realizó la denuncia de que Annie se encontraba en condiciones de virtual abandono en un predio ubicado en Lagos de Moreno, Jalisco, provocando la intervención de Profepa y el aseguramiento del animal el 20 de febrero.

El 19 de marzo, Islas subió un video a su cuenta de X criticando la posibilidad de que Annie fuera trasladada al zoológico de Aragón, lo que un día después se cumplió con el inicio del traslado oficial.

“Escuché que la quieren traer al zoológico de San Juan de Aragón. No sean así, ¿cómo aquí? No hay agua en la Ciudad de México, el smog está incontrolable, la altura no es la mejor y les quiero recordar que ahí tienen a la elefanta que se llama Ely, que tiene muchísimos problemas de salud. No se pasen”, dice el activista en un video publicado en su cuenta oficial de X.

“Estamos en contra del traslado de la elefanta Annie al zoológico de San Juan de Aragón CD Mx, donde no hay agua, no hay condiciones, no tienen personal”, escribió el despacho defensor de derechos de los animales Va X Sus Derechos, encabezado por Susana Ramírez Terrazas.

Asimismo, la organización Abriendo jaulas Abriendo mentes se inconformó con el traslado, recordando que el Zoológico de Aragón fue elegido por encima de otros que sí tienen certificaciones internacionales.

Esta asociación, dirigida por Diana Valencia, ha documentado por años el estado de los animales en el zoológico capitalino, poniendo especial énfasis en la elefante Ely. La activista ha logrado captar en video cómo esta paquidermo presenta estereotipas, lo cual refleja un daño psicológico a largo plazo.

Desde la llegada de Gipsy en junio de 2023, el recinto de las elefantes- a donde llegará también llegará Annie- se encuentra cerrado al público, por lo que hasta ahora no se ha podido observar de manera independiente el estado de salud de las elefantes.

Lo más reciente es un video del 26 de abril de 2023 en el cual se ve a Ely presentar el comportamiento estereotipado que por años ha tenido. 

“El acceso a la zona en donde se encuentra el recinto de los elefantes permanece cerrado por recomendación de los especialistas en fauna silvestre y bienestar animal, para poder continuar con el proceso de acoplamiento de las elefantas africanas”, explica la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (SEDEMA) en un boletín.

Annie siendo trasladada. Foto: Profepa

Según documentó la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (Azcarm), Ely no presentaba estereotipas al llegar a San Juan de Aragón. En el documento “Dictamen sobre la situación y estado de la hembra elefante africano de nombre propio ‘Ely’ bajo cuidado profesional en el Zoológico de San Juan de Aragón”, Azcarm establece que las enfermedades crónicas con las que llegó el mamífero son:

a) Una rotación de la región carpo-metacarpiana del miembro anterior derecho.

b) Una lesión dérmica extensa en el dorso a nivel interescapular.

c) Fracturas en varias uñas.

d) Talla menor al promedio para hembras de la especie y edad que presentaba el ejemplar

e) Una lesión (fístula) en mandíbula izquierda.

Esta dependencia también ha asegurado que el acoplamiento entre Gipsy y Ely fue exitoso y que ambas elefantes se encuentran con buena salud.

Además, señala que el recinto con más de 6 mil 900 metros cuadrados de superficie exterior puede albergar a más paquidermos, como Annie.

Esta extensión sería insuficiente para el desarrollo pleno de las elefantes, según las investigaciones desarrolladas por Joyce Poole- quien es cofundadora de la organización ElephantVoices y ha estudiado a estos animales por más de 40 años.

En el libro An Elephant in the Room: The Science and Well-Being of Elephants in Captivity, los investigadores Joyce Poole y Petter Granli concluyen que debido a la inteligencia y complejo ordenamiento social de los elefantes, estos animales solo pueden desarrollarse plenamente en cautiverio si habitan en manadas diversas y numerosas. Los expertos aseguran que el espacio mínimo necesario es de 50 a 70 kilómetros cuadrados de terreno y hábitats naturales variados.

“Es difícil definir el espacio mínimo necesario para satisfacer los intereses de los elefantes. Según los autores, se necesitan de dos a tres grupos familiares (o 20-30 individuos) para permitir el desarrollo de características de fisión-fusión. Además de este número, la ‘población’ debería incluir machos adultos. Para reducir los problemas de la musth [comportamiento altamente agresivo] prolongada, se debe permitir el establecimiento de una jerarquía natural y los machos deben tener un mecanismo de retirada seguro. Según su estimación, se deberían incluir como mínimo de cuatro a cinco machos adultos que abarquen desde jóvenes adultos (de 15 a 20 años) hasta adultos completamente maduros (de 40 a 50+ años). Para acomodar una población de 25-35 o más individuos y permitir el comportamiento natural de forrajeo y socialización, se estima que se requieren de 50 a 70 km² (~dos km² por individuo) de terreno y hábitats variados“, explican los expertos en el capítulo Mind and Movement: Meeting the Interests of Elephants.

Recinto donde viven Ely, Gipsy y ahora también Annie. Foto: SEDEMA

Por otro lado, la cofundadora de la Coalición para el Bienestar de los Elefantes en Cautiverio, Lisa F. Kane, escribe en el capítulo Contemporary Zoo Elephant Management: Captive to a 19th Century Vision que cualquier hábitat natural de un elefante será mucho más complejo que las “estáticas” exhibiciones de los zoológicos.

De igual forma, realiza una crítica al papel que ha jugado la AZA para justificar los recintos y prácticas en zoológicos que son poco favorables para el bienestar de los elefantes.

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Por ejemplo, menciona que su estándar de tamaño para hábitats es minúsculo en comparación a lo que necesitan los paquidermos. Además, menciona que la AZA permite que las crías machos y hembras, incluso a partir de los tres años, sean separadas de sus madres, sin importar la causa; aún cuando el desarrollo pleno de una elefante solo puede conseguirse cuando está junto a sus hijos e hijas, según el grueso de las investigaciones sobre estos sensibles mamíferos.

La loxodonta africana, Ely. Foto: Río de la Torre | IG (@rio.tv.foto)

Desde que llegó al zoológico de Aragón, en 2012, Ely pasó más de una década en soledad- a pesar de que todas las investigaciones científicas muestran que esta especie altamente social necesita estar acompañada de otros de su especie. 

Antes de la llegada de Gipsy, el Director General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre, Fernando Gual Sill, argumentaba sobre la ausencia de otros elefantes asegurando que Ely ya contaba con compañía a través de sus cuidadores, aunque los expertos señalan que la convivencia entre humano y paquidermo no es igual que entre ejemplares de la misma especie.

Así lo hizo durante la entrevista y recorrido por el todavía no ampliado recinto de Ely que ofreció a Aristegui Noticias para la realización del reportaje “El paso lento de Ely, la elefante más triste del mundo“.

Ahora, con el arribo de Annie, la Sedema considera: “Este traslado beneficia las condiciones de bienestar y manejo de las tres elefantas africanas ‘Ely’, ‘Gipsy’ y ‘Annie’, promoviendo a su vez algunas de las herramientas para apoyar la conservación de su especie que se encuentra en peligro de extinción de acuerdo con la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN)”.

Foto: Río de la Torre | IG (@rio.tv.foto)

Si bien, las autoridades del zoológico de Aragón afirman que el recinto excede los estándares internacionales como los de AZA, la realidad es que el “Centro de Conservación de la Fauna Silvestre” San Juan de Aragón no cuenta con la acreditación internacional de esta asociación. De hecho, ningún zoológico de la Ciudad de México lo hace. 

En agosto de 2017, expertos de la Association of Zoos and Aquariums visitaron los tres zoológicos capitalinos (Chapultepec, Aragón y Coyotes) como parte del proceso de acreditación internacional que pretendía obtener la Secretaría del Medio Ambiente.

Casi 7 años después, siguen sin obtenerla.