Garantizar “calidad educativa”, propone Senado en reforma
Con la incorporación de esta modificación, el dictamen regresa a la Cámara de Diputados, donde se espera sea aprobada hoy.
Al aprobar la reforma educativa, el Senado de la República incluyó el concepto de “educación de calidad” y con ese cambió regresó la iniciativa a la Cámara de Diputados, donde se espera sea avalada hoy.
La reforma educativa, que contempla modificaciones al artículo 3 y 73 de la Constitución, fue aprobada con con 113 votos a favor y 11 en contra. Uno de los cambios destacados al artículo tercero constitucional es la obligación del Estado a garantizar la calidad educativa.
El senador panista Juan Carlos Romero Hicks indicó que se incorporó en el dictamen “como derecho constitucional el derecho de los mexicanos a recibir una educación de calidad, esto parte de acuerdos internacionales en materia de derechos humanos”.
Debido a la modificación, la reforma regresaría a la cámara de origen este viernes y de ser aprobada sin cambios estaría lista para su publicación en el Diario Oficial de la Federación, para que sólo un día después, entre en vigor.
Sólo un día después de que los diputados aprobaran las mismas modificaciones a la ley, los senadores del PRI, PAN, PRD y Partido Verde alargaron la sesión ordinaria para votar uno de los pendientes del periodo legislativo de la LXII legislatura, que concluiría esta misma semana.
La reforma es producto del Pacto por México, firmado por la Presidencia de la República y las tres principales fuerzas políticas de país, y contempla dotar de autonomía al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE); realizar un examen periódico a todos los maestros del país; crear el servicio profesional docente (con lo que se terminaría la herencia de las plazas), entre otros cambios al sistema educativo nacional.
Algunos senadores hicieron algunas reservas a los artículos, pero las propuestas de modificación no se admitieron a discusión.
En tribuna el senador Hicks fundamentó el dictamen donde se establece considerar la opinión de los padres de familia en la determinación de los planes y programas de estudio de la educación preescolar, primaria, secundaria y normal.