La propagación de bodegas en el Centro Histórico ha generado gentrificación en la zona: Canaco

La Cámara de Comercio de la Ciudad de México mantiene su postura con respeto a la legalidad, a la competencia equilibrada y equitativa y en cumplimiento para la regulación para el intercambio mercantil, afirmó José de Jesús Rodríguez Cárdenas, presidente de la Canaco en la capital del país.

“Por eso no me gustaría que se estigmatizara a nuestra cámara como enemiga de los negocios y los productos de origen asiático. Sencillamente respaldamos el apego a la legalidad que se ha establecido en nuestra ciudad y en el resto del país”, dijo en una entrevista con Aristegui en Vivo.

Sobre el tema de la clausura de la plaza de Izazaga  89, por el Instituto de Verificación Administrativa (Invea), y de la proliferación de bodegas de sospechosa licitud, Rodríguez Cárdenas señala que la Canaco advirtió del intercambio mercantil de productos que no cumplían con la normatividad y con el pago de impuestos, como el IVA. Entraban con el concepto de ‘pequeñas cosas’ y así evitaban el pago tributario.

Según él, se abuso de ese concepto mercantil. “En el año pasado se dieron 64 millones de operaciones, en las que existe un “dumping” comercial en el que entran los productos a un precio muy bajo y se vende a otros más elevado, lo que significa un comercio desleal. Sobre la ocupación de inmuebles hay que decir que no cuentan con las características legales para alojar una bodega. Fueron diseñados para ser complejos de vivienda y causan un problema para quienes los habitan. Todos estamos obligados a cumplir con las exigencias de los equipos de protección civil”.

Y subraya que en esos inmuebles no se cumplía con la legalidad para el ingreso y la venta de productos. “Ponían en peligro al usuario y al medio ambiente. “Hubo una queja formal del comercio legal y establecido del Centro Histórico. En la plaza de Izazaga se estaban vendiendo productos, principalmente electrónicos, de los cuales desconocíamos su origen”.

Rodríguez Cárdenas informa también sobre los inconvenientes que ha producido la gentrificación de los comercios tradicionales en la zona centro de la capital: “Por ejemplo la calle de las novias y de los muebles en La Lagunilla han desparecido. O los edificios están ocupados por bodegas que son usadas por este tipo de comercio, que suele pagar hasta dos veces el precio de la renta por esos locales. Eso daña el empleo de los vecinos y a las familias que dependían de ese empleo”, apuntó.

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“Lo que pedimos en la Canaco es que se cumpla con la regulación de uso de suelo, de requisitos de protección civil; que se identifique el origen de los productos que se comercian y que los negocios cumplan con su obligación tributaria. Queremos que se cumpla con la equidad comercial.Y que se garantice la seguridad de nuestros consumidores, que son lo más importante para nosotros”.

Ve la entrevista completa: