Adversidad política regresa a Puebla: primero Alonso, ahora Barbosa

A días del cuarto aniversario de la muerte de la exgobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso y su esposo, el senador y también exmandatario poblano, Rafael Moreno Valle, en un accidente aéreo, la adversidad política regresa al estado con la muerte del gobernador Miguel Barbosa.

Fue el 24 de diciembre de 2018, a 10 días de haber asumido el cargo de gobernadora, cuando la mandataria panista, su esposo y la tripulación del helicóptero fallecieron cuando éste se desplomó en el Cerro de la Chimenea del Chacuaco en Santa María Coronango, Puebla.

En marzo de 2020 la entonces Secretaría de Comunicaciones y Transportes informó que una semana antes de la caída del helicóptero en el que viajaban Martha Érika Alonso, Rafael Moreno Valle y los pilotos Roberto Copee Obregón así como Marco Antonio Tavera Romero, los operadores de la aeronave encontraron dañado el “actuador lineal de alabeo del sistema de estabilidad”, una pieza que sirve para mantener su estabilidad.

Luego de este accidente, Jesús Rodríguez Almeida quedó como encargado de despacho de la gubernatura de Puebla. En observancia a la Constitución Política del estado, el Congreso local eligió como gobernador interino al priista Guillermo Pacheco Pulido, quien convocó a elecciones y gobernó hasta el 31 de julio de 2019, cuando asumió el cargo Miguel Barbosa, ganador de la contienda.

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Luis Miguel Barbosa falleció este martes a los 63 años. El político morenista presentaba problemas de hipertensión y diabetes. Le amputaron una pierna en diciembre de 2013, cuando se desempeñaba como senador de la República.

Su fallecimiento marca la muerte de los últimos tres gobernadores de Puebla elegidos por voto popular.

Durante la sesión del Pleno del Senado de la República, la legisladora poblana, Nadia Navarro, lamentó “la adversidad en la que nuevamente se encuentra Puebla” y, además de desear a su familia una pronta resignación, hizo “votos porque el destino de Puebla sea dirigido hacia el bien, y siempre por el bien común”.

Tras la muerte de Barbosa, la secretaria de Gobierno de Puebla, Ana Lucía Hill Mayoral, será quien quede de encargada del Poder Ejecutivo de la entidad y, al igual que sucedió cuando falleció Martha Erika Alonso, estará al frente del cargo provisional por un plazo de 10 días, hasta que se nombre un nuevo gobernador interino.

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En octubre de 2019, Barbosa afirmó que él había ganado las elecciones de junio de 2018, pero que le había sido robada.

“Yo gané, me la robaron, y los castigó Dios”, dijo el entonces gobernador, haciendo referencia a la muerte de Alonso y Moreno Valle.

Aunque ciudadanos y políticos poblanos exigieron una disculpa por su comentario, Barbosa dijo “que se queden sentados”, y aseguró que se trataba de “expresiones de cultura popular que todos hemos tenido”.