7 puntos de Gurría sobre la situación de México y la OCDE
El secretario general del organismo internacional se pronunció por favorecer las reformas que México requiere, principalmente en materia fiscal, porque insistió que se encuentra por debajo del promedio de los países integrantes.
El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, inauguró este miércoles la reunión “Foro México: Políticas Públicas para un Desarrollo Incluyente”.
Gurría consideró que la relación de México con la OCDE se encuentra un punto clave, y se pronunció por apegarse a lo suscrito por el Pacto por México y mejorar las condiciones en educación, capacidades de los trabajadores, transición a un crecimiento verde, competencia en todos los sectores, mayores servicios sociales y principalmente el aumento en ingresos fiscales, o de lo contrario aseguró que el país no marchará.
Gurría Treviño ofreció en discurso en que destacaron siete puntos:
1. México tiene el presupuesto más pequeño de la OCDE, con ingresos fiscales que representan tan sólo el 19 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que el promedio que manejan los países que integran el organismo es de 34 por ciento, situación que se refleja en el gasto social.
2. El país gasta 6 por ciento del PIB en educación, uno de los que más dedica en términos porcentuales, pero en montos absolutos, lo que se destina por estudiante es insuficiente. Insistió en que la “urgencia de las reformas se manifiesta además en la frustración de nuestros alumnos promedio que después de someterse a la prueba PISA, descubren que van a salir con un retraso de 2 años en comparación con los países con mejor desempeño educativo”, situación que se refleja en que a pesar de que los mexicanos sean los que más horas trabajen entre los países de la OCDE, son los que tienen el nivel más bajo de producción, capacitación e ingresos.
3. Señaló que el gasto en sector salud, se ubica a la par de países con niveles de desarrollo muy inferiores, lo que pone en juego la capacidad del gobierno de cumplir con mejorar el nivel de vida de la población. “La conclusión es a la vez sencilla y brutal: sin reforma fiscal, el Estado Mexicano no puede cumplir con este mandato… muy pocos pagan impuestos y muchos de los que pagan, pagan menos de lo que debieran”.
4. Destacó que si no se promueven las reformas necesarias, no se conseguirá superar “nuestro altísimo nivel de desigualdad y su lacerante impacto en la dignidad de nuestra gente, en la capacidad de crecimiento de la economía, en la cohesión social y la seguridad del país”. Como prueba de ello mencionó que la diferencia de ingresos entre los sectores 10 por ciento más rico y 10 por ciento más pobre es de 27 a 1, en comparación con el promedio de la OCDE que es de 9 a 1.
5. Llamó a mejorar la competitividad en México ya que “las familias más pobres gastan más de un tercio de sus ingresos en mercados en los que hay muy poca o nula competencia, dado que las instituciones públicas hasta ahora han sido más débiles que los monopolios”. Añadió que aunque las reformas de 2011 a la Ley de Competencia pusieron al país entre los mejores en cuanto a la sanción de prácticas monopólicas, pero no se ha conseguido su “instrumentación eficaz”, situación que deriva en el debilitamiento de las instituciones encargadas.
6. Abundó en la necesidad de generar los consensos requeridos y no diluir el impacto de las propuestas legislativas, por lo que se pronunció a favor de “reformas claras y de alto impacto, aun cuando en algunas ocasiones no se logren por consenso” ya que de no hacerlo, se condena al país a “leyes y regulaciones mediocres”.
7. Detalló que la relación entre México y la OCDE se encuentra en un punto clave con el objetivo de apoyar a la administración del presidente Enrique Peña Nieto, mediante la firma de un Acuerdo de Cooperación. Parte de ello fue la entrega del documento “Una Agenda Estratégica para las Reformas en México”, en el que colaboraron todas las áreas del organismo. Aseveró que las 13 decisiones anunciadas por el mandatario durante su discurso de toma de posesión, junto con la firma del Pacto por México, constituyen una plataforma de lanzamiento de cambios estructurales que la nación no había tenido en su historia reciente.