Detrás de los Juegos: Una mirada a la olimpiada médica en París 2024 | Entrevista
En el caso de París, los equipos médicos también dieron fin a un ciclo olímpico que los llevó a competencias internacionales, y concluyó con seis días de eventos llenos de trabajo, recuperación, recargas musculares y atención para evitar complicaciones e imprevistos que pueden resultar en lesiones o incluso, el fin del sueño olímpico.
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Por Alejandro Romero
Los Juegos Olímpicos y Paralímpicos representan el punto máximo en la carrera de miles de atletas que, durante años, preparan su cuerpo y mente para posicionarse en lo más alto del deporte internacional.
Sin embargo, detrás de la olimpiada que lleva a cada edición de la magna justa deportiva, existe un equipo de especialistas interdisciplinarios que dan seguimiento y supervisan la preparación de estos atletas, llevándolos a su punto máximo de cara, en este caso, a los eventos que se desarrollan en la capital francesa de París.
Para tener una visión mucho más cercana a este proceso de preparación y seguimiento, Aristegui Noticias entrevistó en exclusiva a Víctor Montes Felisart, director médico en la competencia de Para Taekwondo y médico del equipo de natación artística mexicano que compitió en los pasados Juegos.
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El fundador de la clínica Grupo Quore, ha fungido también como médico de la selección nacional de taekwondo, con figuras como María Espinoza, tres veces medallista olímpica, y ahora se convirtió en el primer mexicano en desempeñarse como médico en tatami durante unos Juegos Paralímpicos, que contarán con la disciplina por segunda ocasión en su historia.
La olimpiada médica de las ‘Sirenas Mexicanas’
Tras su trayectoria como parte los órganos reguladores del deporte en el país, y tras el retiro del área médica en entrenamiento y competencias a todos los deportes acuáticos por parte de la Comisión Nacional del Deporte (Conade), Felisart abrió las puertas de su clínica privada al equipo de natación artística de México, iniciando así, sin saberlo aún, su camino como médico olímpico.
“Cuando se va como médico de un equipo, viajas con ellos, atiendes todo relacionado a entrenamiento y salud”, destacó en la entrevista, añadiendo que cuando formas parte de un equipo de alto rendimiento se deben atender todos los temas médicos y médico deportivos, dando un acompañamiento completo que se extiende del trabajo previo a la competencia, a los días más activos de los Juegos.
En el caso de París, Felisart y su equipo también dieron fin a un ciclo olímpico que los llevó a competencias internacionales, como el Mundial de Natación Artística, y concluyó con seis días de eventos llenos de trabajo, recuperación, recargas musculares y atención para evitar complicaciones e imprevistos que pueden resultar en lesiones o incluso, el fin del sueño olímpico. .
El reto es tan sencillo y complejo como “solucionar y que tengan oportunidad de entrenar”, permitiendo se desarrolle el proceso de trabajo entre competencias pero sin permitir un agravamiento de posibles lesiones.
Como testamento de ello, dio a conocer que en la capital gala el equipo de las Sirenas mexicanas sufrieron un problema de infecciones respiratorias que pudo haber complicado su participación en un deporte que recae fuertemente en la capacidad respiratoria de las competidoras.
“Es complicado”, aseveró, añadiendo que para el tratamiento “uno debe manejar únicamente medicamento autorizados” por la agencia mundial antidopaje; “Tienes que tomar mucho en cuenta ese aspecto”, mencionó sobre cómo se abordó lo que pudo resultar en una crisis.
Sin embargo, las ‘Sirenas’ fueron capaces de competir con normalidad y luchar por finalizar entre las mejores 10 delegaciones del mundo en la disciplina, un constancia del trabajo y preparación tras bambalinas que se vive desde la villa olímpica y que confirma, según compartió el doctor Felisart que si el trabajo está bien hecho “no nos notamos”, confirmándose como parte héroes silenciosos detrás de los atletas.
“Si mi trabajo está bien hecho no nos notamos. Si tú no tuviste que preguntar, oye ¿pero qué le pasó? oye ¿qué onda con él o por qué está cojeando? Ahí es cuando sale el tema”, explicó sobre lo que opina él es una de las pruebas de la buena labor médica en estos escenarios.
Cuando salen a relucir los doctores, por ejemplo, en la Federación de futbol es porque tienen que dar una rueda de prensa para decir qué le pasó a su deportista. Claro, entonces ahí es donde conocemos.
“No es solo el atleta, obviamente es el que se lleva toda la friega y reconocimiento, como debe se ser, pero normalmente hay un equipo multidisciplinario atrás de ellos […] dando el tipo de apoyos que deberían de tener todos los atletas, aunque la realidad es que no todos lo tienen, menos los paralímpicos”, destacó.
Finalmente, situarse en el máximo escenario del deporte internacional puede ser intimidante, por lo que no se puede demeritar el peso que supone tener los aros olímpicos por toda la sede: “impone muchísimo que haya aros olímpicos, 80 cámaras dirigidas a todos lados”, sin embargo, son esos momentos de mayor “adrenalina” los que sacan a relucir las capacidades del equipos médico.
“Se vivió increíble, pero en los momentos de concentración se te olvida. El enfoque es estar con las atletas”, sentenció.