Feministas acusan amenazas de Sandra Cuevas y robo por personal de Cuauhtémoc
La alcaldía Cuauhtémoc aseguró a este medio que las mujeres tienen derecho a protestar en la Plaza Río de Janeiro, pero no a realizar actividades de intercambio comercial.

Desde hace dos años, tres organizaciones feministas crearon “La Mercadita” en la Plaza Río de Janeiro, ubicada en la colonia Roma de la Ciudad de México, para tejer una red de apoyo entre mujeres y llevar a cabo protestas económicas semanales. Sin embargo, las colectivas Marea Morada, Zetian y Onna Bugeisha denuncian un creciente clima de “hostigamiento y represión” por parte de la alcaldía Cuauhtémoc y señalan directamente a la alcaldesa Sandra Cuevas de amedrentar a las mujeres manifestantes.
La constante tensión entre la alcaldía y las colectivas llegó a un punto álgido de violencia al mediodía del pasado domingo 4 de junio, cuando personal de la Cuauhtémoc retiró mercancías y objetos personales a las mujeres; incluyendo bolsos, celulares y carteras. Entre las afectadas hay adultas mayores, estudiantes, profesionistas y decenas de mujeres que conforman la red de apoyo grupal.
Las feministas entrevistadas en sitio por Aristegui Noticias el día de los hechos consignaron que también fueron agredidas físicamente y que muchas sufrieron cuadros de crisis nerviosa por el acto violento y sorpresivo que quedó registrado en múltiples videos. Las mujeres que compartieron su testimonio a este medio prefirieron no hacer público su nombre por miedo a represalias y ver amenazada su integridad física.
“Primero llegó el grupo de policías Muralla, de la alcaldía, con otros vestidos de civiles a encapsularnos. Desde el viernes ya habían venido a amedrentarnos. La magnitud de la gente que vino no corresponde a una respuesta normal ante una protesta pacífica feminista “, señaló una integrante de Marea Morada.
Posteriormente, “llegaron sin avisar y por detrás de nosotras un montón de hombres vestidos de civil. Jamás se identificaron. Llegaron y se llevaron nuestras cosas corriendo. Solo llegaron y nos arrebataron todo“, afirmó una mujer perteneciente a Zetian.
“La gente que vino a retirarnos las cosas y nos agredió físicamente eran personas completamente vestidas de civiles y llegaron como grupo de choque. Hubo violencia física y emocional en contra de nosotras. Estuvieron a punto de atropellar a una compañera”, aseguró otra integrante de Marea Morada.
“Lo que hizo hoy la alcaldía fue robarse sus pertenencias: se llevaron sus bolsas con dinero, sus bolsas con celulares“, agregó una mujer más de Zetian.
Consultado por este medio, un funcionario de la alcaldía Cuauhtémoc afirmó que los objetos retirados de la protesta son los que las mujeres someten a algún tipo de intercambio comercial y confirmó el decomiso de objetos personales, atribuyéndolo a que estos se encontraban mezclados con las mercancías. El servidor público agregó que las mujeres pueden pasar en cualquier momento a recoger sus pertenencias a la bodega del edificio de gobierno.
El gobierno local afirmó también que las mujeres tienen derecho a manifestarse, pero no a vender en la Plaza, lo que a ojos de la alcaldía las convierte en comerciantes sin un permiso debido.
En contraste con esta visión, las mujeres defienden su presencia en la plaza argumentando que realizan un tipo de protesta considerada y defendida por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
El trueque de bienes forma parte de las protestas económicas. La CNDH define a este tipo de manifestaciones “como una expresión del descontento social en contra de la política económica y el contexto social y estructural que excluye a ciertos sectores de la población, como sucede en México con la pauperización económica de las mujeres“.
Concebir a las colectivas solo como comerciantes y querer regularlas bajo esta concepción deja de lado lo dicho por la CNDH sobre la distinción entre la venta normal y la protesta económica.
“El ejercicio de compraventa mediante la oferta de bienes y servicios en el espacio público que se realiza desde el comercio en el espacio público tradicional no necesariamente tiene una concepción ideológica antisistémica, como lo tiene la protesta feminista contra la violencia económica”, señala el organismo.

Fotos: BJC / AN
En un comunicado oficial, la alcaldía Cuauhtémoc asegura que la normativa actual no permite el comercio en parques, plazas y jardines. “Existe la disposición de apoyar a los colectivos feministas para que sean reubicados”, añade.
Asimismo. el gobierno local asegura que el espacio de la plaza está dedicado al esparcimiento de niños, niñas y adultos.
Te puede interesar > Tras pleito, Cuevas ‘declara’ a sonideros patrimonio cultural de la Cuauhtémoc
Estos señalamientos son rechazados por las tres colectivas que conforman a “La Mercadita”, pues argumentan que tienen el derecho a ocupar una plaza pública para realizar su protesta económica y que las regulaciones para comerciantes no pueden aplicarse a ellas, ya que no son vendedoras informales, sino mujeres que se manifiestan y el trueque forma parte de su lucha.

Foto: BJC / AN
Según información oficial, dos días antes del retiro violento del 4 de junio, autoridades de la alcaldía anunciaron que las colectivas no podrían colocarse más a realizar actividades comerciales. Integrantes de Zetian y Marea Morada aseguraron a Aristegui Noticias, que desde entonces hombres no identificados, así como policías, comenzaron a hostigarlas.
Las mujeres feministas también han sido confrontadas directamente por la alcaldesa Sandra Cuevas. Tan solo el 29 de abril, la mandataria local realizó un evento en la plaza y abordó a los tres colectivos.
En ese momento les dijo: “Les aviso, grábenme bien, Sandra Cuevas- alcaldesa de Cuauhtémoc-, a partir de mañana no se van a permitir más puestos en la Plaza Río de Janeiro. Esto, por la seguridad y por petición de todas las niñas y niños que vienen a esta plaza”.
Según consigna la periodista Ale del Castillo en el medio La Lista, “después del mensaje de la alcaldesa, el sábado 6 de mayo, la plaza amaneció con lonas colgadas en el interior y el perímetro del parque con el mensaje: ‘Exigimos a la alcaldía Cuauhtémoc la liberación de la Plaza Río de Janeiro‘, que presuntamente colocó un grupo de vecinos que sostuvo un encuentro en la alcaldía“.
Integrantes de las tres colectivas entrevistadas por Aristegui Noticias coincidieron en señalar que la alcaldesa las habría amenazado en otras ocasiones e incluso insultado vía redes sociales.

Foto: BJC / AN
Antes del desalojo del domingo pasado se tenían previstas mesas de diálogo entre las colectivas y el gobierno local. Sin embargo, según dijeron mujeres de las tres agrupaciones a Aristegui Noticias, el decomiso de las pertenencias personales, así como de objetos de protesta y trueque, mostró “mala fe” y una “actitud represora” por parte de la alcaldía.
Las colectivas adelantaron que se mantendrán en lucha y no desistirán.

Contenido relacionado
