Celebra EPN quitar al PRI ‘dogmas’ y candados ‘obsoletos’
El Presidente de México y el líder del PRI coincidieron en que la modificación a los estatutos en temas económicos y de energía amplían las oportunidades de intervenir en la vida democrática
El presidente Enrique Peña Nieto celebró este domingo haber dejado atrás “candados obsoletos y dogmas” después de que el PRI reformó sus documentos básicos en los que abrió la puerta al IVA en alimentos y medicinas, así como mayor inversión privada en Pemex y las candidaturas independientes.
Al asistir a la clausura de la XXI Asamblea plenaria del PRI, el titular del Ejecutivo, destacó en primer lugar que gracias a los cambios realizados “cada militante ganó en posibilidades de postulación para ser candidato, al eliminarse el requisito de tener un cargo de elección popular”.
“Con esta histórica decisión, el PRI deja atrás los obsoletos candados que sólo limitaban los derechos de la mayoría de los militantes”, señaló.
En segundo lugar, el presidente mencionó que su partido se posiciona como un partido “cercano a la sociedad, que reconoce los nuevos liderazgos ciudadanos” al incorporar y postular a cargos de elección a quienes no sean militantes del PRI (candidatos ciudadanos).
Peña Nieto sostuvo que el PRI es un partido transparente y abierto al escrutinio público por lo que celebró la creación de la Unidad de Transparencia y Acceso a la Información del Comité Ejecutivo Nacional.
Además, el titular del Ejecutivo aplaudió que el partido ahora cuente con “un instrumento para marcar distancia y reprobar a aquellos militantes que en el ejercicio de su responsabilidad pública no estén a la altura ética que exige nuestro partido”.
También destacó con un nuevo programa de acción, “el PRI cuenta con una guía para atender los retos y necesidades del país”.
“Con las definiciones que aquí se han tomado, el PRI ratifica su firme y determinado compromiso con la calidad de vida de las familias mexicanas. Así, con pragmatismo y sin dogmas, el PRI se transforma para poder transformar a México”, dijo el priista que tardó hasta 40 minutos en llegar al templete, donde pronunció su discurso, debido a que decenas de militantes se le acercaron en su camino para tomarse la foto con él.
Peña aseveró que su responsabilidad es lograr que México despliegue todo su potencial, por lo que “no hay intereses intocables; el único interés que protegeré es el interés nacional”.
Urgente, la reforma energética: PRI
El líder del PRI, César Camacho, aseguró que con la modificación de los documentos básicos del partido se rompieron con “ataduras que se convirtieron en atavismos”, ensancharon los espacios para la participación ciudadana y ampliaron las oportunidades de intervenir en la vida democrática.
“Queremos un PRI más vigilante de sus militantes convertidos en autoridades, que pueda formular recomendaciones legítimas, oportunas y enérgicas, para exigirles un desempeño apegado a la legalidad y al cumplimiento de sus compromisos”, mencionó.
“Compartimos la urgencia de una reforma energética para el desarrollo, manteniendo la rectoría del Estado, modernizando el sector para aprovechar todo su potencial, y garantizando que la explotación de nuestros recursos naturales beneficie a todos”, indicó.
Señaló que los documentos básicos del PRI tendrán más cauces que diques y no serán catálogos de pretextos, sino una “larga lista de posibilidades para la realización de los mexicanos”.
Sobre el tema del IVA en alimentos y medicinas, Camacho no dedicó ni una línea de su discurso.
En el acto estuvieron presentes la mayoría de los gobernadores priistas del país, así como senadores, diputados, asambleístas, presidentes municipales, entre otros funcionarios públicos; además de los 4 mil 148 delegados efectivos del PRI.
Textual el discurso de Peña Nieto en la sesión plenaria de la XXI Asamblea Nacional:
México, Distrito Federal
3 de marzo de 2013.
Muchísimas gracias.
Muy buenas tardes a todas y a todos ustedes.
Quiero saludar con respeto, a la dirigencia de mi partido, a su Presidente César Camacho Quiroz y a su Secretaria General, Ivonne Ortega Pacheco.
Saludar a los señores Coordinadores Parlamentarios de los priistas en el Senado de la República y en la Cámara de Diputados.
A los señores Gobernadores de distintas entidades del país.
A dirigentes de mi partido, de sus sectores, de sus organizaciones.
A Senadores de la República, Diputados Federales y locales, Presidentes Municipales, regidores.
Y a toda esta gran representación del priismo que hoy se da cita en ésta su XXI Asamblea.
Saludo con afecto, a todos los jóvenes, a los hombres y a las mujeres del priismo del país.
Compañeras y compañeros de mi partido.
Acudo a esta XXI Asamblea Nacional en ejercicio de mis derechos políticos, orgulloso de militar en un gran partido político: en el Partido Revolucionario Institucional.
Qué mejor espacio que éste para expresar una vez más lo profundamente agradecido que estoy con mi partido.
A todos ustedes, siempre, muchas gracias.
Gracias por su confianza, por sus muestras de afecto, de solidaridad y, sobre todo, por su permanente respaldo en esta gran encomienda que tengo de encabezar las instituciones de la República.
Con el arduo trabajo que realizaron en cada sección, en cada municipio y en cada entidad federativa, logramos que la mayoría de la ciudadanía eligiera nuestro proyecto de cambio con rumbo para México.
Gracias a todas y todos ustedes, el PRI ha iniciado una nueva era en la Presidencia de la República.
Al igual que en aquella inolvidable noche de victoria del 1 de julio del 2012, hoy nuevamente el priismo está de fiesta.
Aquí se vive y se siente la pasión y el entusiasmo, la energía de los jóvenes, de los hombres y muy señaladamente, de las mujeres del PRI.
La de hoy, es una Asamblea de alegría y celebración, pero sobre todo, es una Asamblea de renovación, compromiso y transformación.
El PRI entiende el momento que vive México, y hoy se renueva para estar a la altura de las aspiraciones de los ciudadanos.
Una vez más, el PRI se distingue por su dinamismo y su capacidad de transformación. Desde su origen en 1929, el partido supo cohesionar las más variadas corrientes políticas, y se convirtió en un factor de unidad, paz y progreso nacional, se conformó así una fuerza política nacional que permitió transitar de un país de caudillos a un México de instituciones.
Inició una etapa de construcción nacional. El PRI legó a México leyes de vanguardia, políticas públicas de avanzada, grandes obras de infraestructura y programas sociales emblemáticos.
Nuestro partido, también fue promotor de la apertura y consolidación democrática, escuchó a una sociedad mexicana más plural y con más participación.
Cuando hubo alternancia, también supo ser una oposición responsable. Lejos de lamentarse, el PRI trabajó para levantarse.
Nuestro partido impulsó la democracia y en democracia el PRI volvió a triunfar.
Así llegamos a esta XXI Asamblea Nacional, en la que el PRI se renueva para encabezar las transformaciones que México necesita. Lo hace en medio de una simbólica coincidencia. En su XXI Asamblea, los priistas nos comprometemos a hacerle frente a los grandes desafíos del Siglo XXI.
Esta Asamblea trasciende la simple formalidad estatutaria. Representa una frontera entre el ayer y lo que hace el PRI de hoy para construir un México con un futuro mejor.
Viniendo del triunfo electoral, el PRI, sin caer en la autocomplacencia, ha optado por examinarse y redefinir su posición ante las nuevas circunstancias del país.
Con ideas, con argumentos y con intensos debates, el PRI ha logrado poner al día sus documentos básicos.
Nuestro partido se moderniza para ser más competitivo y ganar la confianza ciudadana. Y lo más importante, nuestro partido se transforma para representar y servir mejor a todas y todos los mexicanos.
Como militante orgulloso del PRI, reconozco el trabajo de nuestra dirigencia y felicito a los delegados por los acuerdos alcanzados en esta memorable Asamblea Nacional.
Quiero destacar, junto a ustedes, algunos de los cambios sustantivos que hoy se han aprobado.
Primero. Somos un partido que revalora la experiencia y el perfil de cada uno de sus militantes. Gracias a la madurez de esta Asamblea, cada militante ganó en posibilidades de postulación para ser candidato, al eliminarse el requisito de tener un cargo de elección popular.
Con esta histórica decisión, el PRI deja atrás los obsoletos candados que sólo limitaban los derechos de la mayoría de los militantes.
En segundo lugar. Nos posicionamos como un partido cercano a la sociedad, que reconoce los nuevos liderazgos ciudadanos. Somos un partido que hoy ha abierto sus puertas para incorporar y postular a cargos de elección a quienes, más allá de la militancia, cuentan con la capacidad y la confianza para poder servirle al país.
Tercero. Hoy, somos un partido más transparente, abierto al escrutinio ciudadano y a la rendición de cuentas.
Con la creación de la Unidad de Transparencia y Acceso a la Información del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, nos colocamos, como partido nos colocamos a la vanguardia en esta materia.
Pero no sólo eso, hoy el PRI cuenta con un instrumento para marcar distancia y reprobar a aquellos militantes que en el ejercicio de su responsabilidad pública no estén a la altura ética que exige nuestro partido.
Y cuarto. El PRI, el PRI se asume hoy como el partido que enfrentará los desafíos del Siglo XXI.
Con un nuevo programa de acción, el PRI cuenta con una guía para atender los retos y necesidades del país.
Con las definiciones que aquí se han tomado, el PRI ratifica su firme y determinado compromiso con la calidad de vida de las familias mexicanas.
Así, con pragmatismo y sin dogmas, el PRI se transforma para para poder transformar a México.
Compañeras y compañeros de partido:
Los mexicanos nos han dado una nueva oportunidad para servirles desde el Gobierno de la República. Es una oportunidad que debemos valorar y corresponder, llevando a las familias de México a mejores niveles de vida.
Ejerzo con responsabilidad el mandato que los ciudadanos me han conferido para servir al país. Al hacerlo, también asumo un compromiso con la militancia de mi partido, con ese compromiso trabajaré todos los días por el bien de la Nación.
Entiendo que la mejor forma de apoyar y promover al partido en el que orgullosamente milito, el Partido Revolucionario Institucional, es ejerciendo una presidencia democrática, apegada a derecho y que dé resultados concretos a los mexicanos.
Mi responsabilidad es lograr que México despliegue todo su potencial. No hay intereses intocables. El único interés que protegeré es el interés nacional.
Tomaré las decisiones que exige la transformación del país.
El éxito del PRI depende del éxito de México.
Éste es un llamado a todos los priistas para que renueven su compromiso con nuestro país. Convoco a toda la militancia para que desde su espacio de actuación, desde su trinchera, asuma su responsabilidad con la Nación.
México se construye todos los días, desde cada rincón de la Patria. Demostremos con nuestra actitud, nuestra voz, nuestro actuar, que somos una nueva generación de priistas. Cada uno de ustedes es un líder con vocación de servicio y decisión para transformar su comunidad.
La gran transformación de México demanda la participación de todos los priistas. De mujeres y hombres dispuestos a cambiar la realidad y alcanzar un mejor país.
En cada priista hay un líder transformador que desde la base y con audacia, está dispuesto a mover a México.
Nuestra misión es clara y precisa: Transformar a México.
Muchas gracias.
Textual el discurso de Camacho Quiroz en la sesión plenaria de la XXI Asamblea Nacional:
México, Distrito Federal
3 de marzo de 2013.
Priista Enrique Peña Nieto, Presidente de los mexicanos.
Compañeras y compañeros.
Ojos irritados por los desvelos, pies adoloridos, gargantas resecas, largas jornadas de trabajo. Esas penurias de la campaña se compensaron con el inigualable sabor de la victoria.
Triunfamos sin triunfalismo; ganamos sin derrotar a nadie; recuperamos la presidencia sin arrebatos de fuerza.
Hace ocho meses ganó un partido y ganó un proyecto de Nación. Merecidamente, ganó Enrique Peña Nieto y ganó México.
Sin actitud festiva, esa misma noche los priistas cobramos conciencia de la necesidad de iniciar, cuanto antes, un proceso que condujera a tomar medidas radicales para no rezagarnos; es más, para anticiparnos.
Con esa actitud llevamos a cabo esta Asamblea.
El Partido ya está listo para protagonizar, con audacia, los siguientes capítulos de la vida nacional.
Con libertad al decir y respeto al escuchar, los militantes le dieron rumbo y consistencia a la deliberación. Ellos son mucho más que la fuerza del partido, son el partido mismo, los que le dan sentido y destino.
Las estructuras, los sectores y las organizaciones son cuerpo que da forma al priismo, pero los militantes son quienes le dan vida. Militantes y dirigentes que establecieron el ritmo y marcaron el rumbo.
Producto de la fecunda Asamblea, hemos logrado hacer más sencilla, ágil y abierta nuestra vida interna, para que el partido sea más eficaz, además, actualizamos nuestra posición respecto a los grandes retos nacionales.
Hicimos conciencia de que debemos romper ataduras que se convirtieron en atavismos; ensanchar mucho más los espacios para la participación, más jóvenes, más mujeres, para hacer más atractiva la política, y ampliar las oportunidades de intervenir en la vida democrática, de modo que aumentemos las posibilidades de triunfo.
Queremos un PRI más vigilante de sus militantes convertidos en autoridades, que pueda formular recomendaciones legítimas, oportunas y enérgicas, para exigirles un desempeño apegado a la legalidad y al cumplimiento de sus compromisos.
El PRI sabe que si queremos empleos mejor remunerados, seguridad social universal, dignificación de la vida rural, ampliación y mejoramiento de la infraestructura, y el impulso a las actividades productivas, debemos promover una inteligente reforma hacendaria integral, equitativa por cuanto a los ingresos, y responsable socialmente respecto a los egresos.
Compartimos la urgencia de una reforma energética para el desarrollo, manteniendo la rectoría del Estado, modernizando el sector para aprovechar todo su potencial, y garantizando que la explotación de nuestros recursos naturales beneficie a todos.
Más competencia, para que la población tenga acceso a productos y servicios con mayor calidad y a mejores precios.
En síntesis, que los documentos básicos, plataforma del Ejecutivo y el Legislativo, tengan más cauces que diques; no catálogos de pretextos, sino una larga lista de posibilidades para la realización de los mexicanos.
Señor Presidente: La transformación del PRI acentúa su condición de aliado de las personas; transmisor de las necesidades de la gente; facilitador para las organizaciones sociales, e intérprete fiel de la percepción ciudadana, pero también su transformación subraya la disposición del priismo de ser protagonista durante su gobierno, un aliado que este siempre en los momentos delicados, que este viendo por el bien de los mexicanos.
Sirviendo a todos por igual, por mandato de la ley y convicción ética, Enrique Peña Nieto reivindica, sin dobleces, su derecho político a militar.
Por eso, su Partido hoy le ofrece respeto y respaldo. Respeto no sólo a su investidura, sino al comportamiento vertical de su gobierno, respeto por su determinación; y a su determinación de someterse permanentemente al escrutinio y ajustarse a los límites del poder.
Respaldo a su actitud concertadora, dispuesta siempre a pactar y construir; por su disposición a colaborar con los otros poderes públicos y ámbitos de gobierno; respaldo por su firmeza y arrojo para decidir siempre, lo que conviene a la República. Porque reconoce el imperio de la ley y la eficacia de la política; porque sabe cuándo actuar con toda la fuerza del Estado.
Para orgullo de todos, inteligencia, emoción y firmeza, ha mostrado el Presidente de la República, nuestro compañero: Enrique Peña Nieto.
Su Partido, nuestro Partido; sus fieles militantes transformados en activistas, con el impulso de hoy y el entusiasmo que se irradia, vamos a trabajar para obtener la confianza de muchos mexicanos. El PRI puesto en acción va a ganar el próximo 7 de julio.
Esta Asamblea ha hecho patente que una fuerza muy grande corre por las venas del priismo; una energía motriz capaz de transformarlo todo; un ímpetu indomable que llama a la construcción nacional, y esa fuerza, es el amor a la patria.
Éste es el momento exacto en que debemos sumarnos a la gran causa. Tenemos la urgencia y el temple para asumir los retos del futuro que empieza hoy. Con Enrique Peña Nieto al frente, apretemos el paso sumando nuestros esfuerzos para transformar a México, nuestro amado México.
Muchas gracias.